Entrevista a Gonzalo Oliveros Reina con motivo del Homenaje a su abuelo
«Después de 100 años, la saga está activa y con ganas de seguir enseñando a las nuevas generaciones que vienen detrás nuestra. En nuestra familia es algo que viene de sangre y en los genes.»
«Recuerdo que aunque yo era pequeño, la alegría en mi familia fue desbordante, mi padre no podía contener incluso la emoción en esos días.»
«Mi abuelo era un apasionado de la semana santa, me cuentan que incluso iba a Sevilla los días que no sacaba pasos y se llevaba a mi padre a ver amigos suyos capataces que le permitían dar levantas a algunos de sus pasos.»
– ¿Como acogistes este emotivo homenaje que se le hizo a tu abuelo Gonzalo Ruiz hace varias semanas y como te sientes?
Lo acogimos con gran alegría y gozo, puesto que era algo que llevábamos esperando muchos años. La sensación fue como que, al fin, mi abuelo al que por desgracia no conocí, tenía lo que se merecía después de tanto que hizo por las cofradías y su gente del costal.
– Este año cumples los 100 años desde que tu abuelo fuera capataz del Santo Entierro, Jesús Nazareno del Dulce Nombre y de otras hermandades de otras Ciudades. ¿Que experiencia tienes o puede aportar Gonzalo en estos 100 años.?
Después de 100 años, la saga está activa y con ganas de seguir enseñando a las nuevas generaciones que vienen detrás nuestra. En nuestra familia es algo que viene de sangre y en los genes. Solemos debutar siempre a temprana edad, alrededor de los 14 años, para así tener experiencia y solvencia cuando apenas cumplimos la mayoría de edad, esa manera de enseñar prematuramente es la que nos hace tener seguridad en nuestras órdenes a los costaleros serán correctas a pesar de las dificultades y estrecheces de las calles o puertas que nuestros pasos tengan que pasar
Cuando la Hermandad del Dulce Nombre pidio hace 28 años la calle con el nombre de tu abuelo como lo recibistes
Recuerdo que aunque yo era pequeño, la alegría en mi familia fue desbordante, mi padre no podía contener incluso la emoción en esos días.
– ¿Que cosas recuerdas de tu abuelo cuando era capataz?
Los recuerdos míos personales son anécdotas contadas por mi padre e incluso de personas que me paran por la calle al saber que soy su nieto y me cuentan su historia debajo de las trabajaderas y como mi abuelo les dejo buenos recuerdos al frente del martillo
– ¿Y de tu bisabuelo Manuel?
De mi bisabuelo Manuel solo tengo fotos y recortes de periódicos de la época alabando su maestría al frente de los pasos y como fue él quien introdujo el cambio de trabajadera a costal que por aquel entonces no existía en la Semana Santa Alcalareña.
– ¿Como vivia tu abuelo Gonzalo la Semana Santa delante del martillo?
Mi abuelo era un apasionado de la semana santa, me cuentan que incluso iba a Sevilla los días que no sacaba pasos y se llevaba a mi padre a ver amigos suyos capataces que le permitían dar levantas a algunos de sus pasos, incluso me cuentan mis mayores, que mi abuelo hacia el trayecto de la catedral a algunos pasos de un capataz muy famoso sevillano que era no creyente y le daba respeto mandar sus pasos por dentro de las naves del templo metropolitano.
¿Como vives la Semana Santa y que experiencia tienes delante del martillo?
Desde pequeño soy un jartible de la semana santa, pertenezco a las hermandades del Santo Entierro, Dulce Nombre y amargura de Alcalá, Vera -Cruz de El Coronil y en Sevilla mi Polígono San Pablo y San Gonzalo, realizando incluso estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral con esta última. En cuanto a mi experiencia como capataz, como comenté anteriormente, nosotros empezamos muy pequeños a seguir los pasos de nuestros mayores y con solo 5 años llamé por primera vez el palio de la amargura. A los 14 años saqué de la Iglesia a mi querida Virgen del Dulce Nombre y desde entonces fui segundo capataz de mi padre sacando por primera vez de la capilla a la Soledad del Santo Entierro a los 17. Desde los 27 años , ya con mi padre retirado, soy el actual capataz de la Virgen de los Dolores de la Hermandad de la Vera-cruz de El Coronil y por último, soy capataz de la Virgen De Bondad y Esperanza del barrio sevillano del polígono San Pablo desde hace 2 años
¿A los 46 años fallecio tu abuelo, supongo que muy triste y muy dolido?
La muerte de mi abuelo fue una tragedia muy prematura que tristemente nos dejó a todos un vacío enorme para siempre, de hecho no conoció a ninguno de sus nietos y eso es algo que siempre nos ha afectado a todos.
¿Recuerdas algún costalero o capataz de ese año?
Hace 3 años, un costalero llamado Jose Antonio Cabello que empezó muy joven con mi abuelo llamado y siguió saliendo con mi padre, me comento que quería salir debajo conmigo para poder decir que ha sido costalero de 3 generaciones de los Oliveros, y así fue. Otro costalero y posteriormente capataz, fue Romualdo Oliveros, familia y capataz histórico de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Alcalá. Son personas a las que le tengo mucho aprecio porque junto con mi padre y mi tío me han enseñado mucho en este bendito mundo de ser los ojos del Rey y la Reina de los Cielos.
– ¿Por ultimo, un mensaje para todos los seguidores de Tramo a Tramo.?
Mandarles a todos un cordial saludo y decirles que ha sido un placer poder contar cosas sobre nuestra saga de capataces en este espacio tan bonito dedicado a nuestra Semana Santa Alcalareña
– Muchas gracias, encantado de hablar contigo y mantener esta entrevista.
Dirección Y Redacción Entrevista: Miguel Angel Perea